Colégio de Médicos Distrito VII

Se efectuó un acto en reconocimiento a dos colegiados por cumplir 50 años de médicos

Cumplir 50 años de médico es, sin lugar a duda alguna, una fecha que adquiere un valor muy especial. Inevitable es recordar el inicio de transitar un sendero en donde la vocación se plasma en la realidad del objetivo alcanzado.-

Mas, esa fecha de referencia, marca el comienzo de un largo camino en donde confluirán muchos recuerdos, momentos de felicidad y tristeza pero, ineludible por cierto, también de mucho sacrificio. Teniendo como horizonte, siempre, un objetivo principal; el irrenunciable compromiso hacia los pacientes y la comunidad. Es la vida misma reflejada en una profesión.-

Pero el llegar a ese día en pleno ejercicio de la misma es patrimonio de pocos.-

En el mes de diciembre, al finalizar la última reunión del año de CD, nuestro salón auditorio fue el lugar donde nos tocó presenciar lo que definiría una cita de singulares características. Pues nos tocó compartir en un sencillo, pero muy sentido, acto el reconocimiento a dos médicos de nuestro Distrito que cumplían dicho aniversario y que están en actividad. Lo que el Colegio de Médicos se propuso homenajear se transformó, para todos los concurrentes, en un hecho inolvidable.-

Nos referimos al Dr. Carlos José García; recibido en la UBA el 10/03/1964 y al Dr. Rubén Omar Barroso; egresado de la UNLP el 15/05/1964.-

El Dr. Raúl D. Riccioppo; integrante ad hoc de la Comisión Asesora, por ser un Delegado ex Presidente del Colegio de Médicos, de la Comisión de Trabajo Médico y Coordinador del FAP, quien junto al Secretario General; Dr. Claudio J. Cragnolino, fueron los encargados de entregarle el diploma de Honor y un plato alegórico al Dr. Carlos J. García. Nació en Gral. Villegas y retornó una vez recibido de Médico. Con una prosa clara, descriptiva y contundente nos deleitó con sus anécdotas, transportándonos a aquellos primeros tiempos de su arribo y dejando lúcidas reflexiones. Fuimos partícipes de diversos aspectos de su historia de vida, actividades desarrolladas en forma paralela; su participación en el Colegio de Médicos, política y la creación de la Clínica Modelo de su localidad, entre tantas otras acciones siempre involucradas con su comunidad. Concluyó reconociendo el trascendente valor de su señora esposa, quien se encontraba presente, y la importancia que siempre ha tenido su compañía para emprender nuevos desafíos. El continúa ejerciendo su inocultable y vigente vocación.-

Posteriormente se vivió una situación que emocionó a todos. Fue durante la presentación del Dr. Rubén O. Barroso, nacido en la localidad de 9 de Julio, lugar al que retornó una vez completada su residencia en Pediatría. Nos honró presenciando, previamente, la reunión de CD. El Presidente le dio la bienvenida y le agradeció ser parte de ella. Fueron los encargados de entregar los reconocimientos el Dr. Horacio M. Cardús, Presidente del Colegio de Médicos y su hijo, el Dr. Ignacio Barroso, Delegado por 9 de Julio e integrante de la Comisión de Especialidades. Ese inolvidable abrazo trajo al hoy el recuerdo del momento donde el padre entregó a su hijo el diploma de Médico. El Dr. Barroso también nos dejó indelebles anécdotas. Contó de su vocación inicial por Psiquiatría para, posteriormente, formarse en la Especialidad de Pediatría. Su relato dio prueba de una profunda pasión por su tarea. También de la felicidad que le genera el compartirla con su hijo Ignacio. El trabajar siempre juntos, como expresó con indisimulable orgullo, resaltando que nunca existió diferencia alguna entre ellos. También se refirió a que otro hijo se especializó en Psiquiatría, su primera inclinación. Aclaró que, por razones del tipo de especialidad, no comparten el mismo espacio pero la desarrolla vecino a él. Asimismo habló sobre el valor de su familia, el sentimiento de gratitud con la vida, el poder transitar en plenitud el presente ejerciendo su especialidad y, como enfáticamente manifestó, que no dudaría en volver a estudiar medicina.-

Un intenso y sentido aplauso se escuchó al finalizar las palabras de ambos colegas. No podía ser menos. Todos fuimos testigos de un momento único, imposible de olvidar y del cual estamos profundamente reconfortados.-

Doctores Carlos García y Rubén Barroso ¡¡¡Muchas gracias por su ejemplo!!! Fueron ustedes quienes nos homenajearon con su presencia.-

MESA DIRECTIVA
Colegio de Médicos D VII